El Hospital de Villavieja que nunca terminaron
Para construir este ‘centro de salud’ el mandatario de ese entonces, Raúl Arturo Ramírez Olaya, acabó con una escuela. Más de $550 millones de pesos se destinaron para este Hospital, el cual está lleno de grietas y desvalijado por los ladrones. Pasan los días y son pocas las gestiones del actual alcalde por sacar adelante esta obra.
Han pasado más de 12 años y la lluvia, el sol, los ladrones y la negligencia de los políticos de turno, han aportado en la destrucción del hospital de Villavieja. El contrato para este proyecto se fijó cuando estaba culminando su mandato la exalcaldesa Tania Beatriz Peñafiel España, y posteriormente se ejecutó en los cuatro años de gobierno de Raúl Arturo Ramírez Olaya, quién dejó la obra convertida en un Elefante Blanco.
El centro de salud beneficiaría a los más de 12 mil habitantes de la Capital Paleontológica del Huila, pero hoy sus habitantes, lamentan haber elegido a alcaldes mañosos.
“Eso cuanto no lleva así en ese estado, abandonado, deteriorándose cada día. Eso le da a uno tristeza ver a las administraciones pasar. La corrupción viene por lo grande” aseguró Narciso Perdomo, habitante de Villavieja.
Dicho proyecto inicialmente estaba previsto para construir dos etapas, por un valor superior a los 550 millones de pesos. El hospital que nunca se entregó, hoy es blanco de los ladrones, quienes, aprovechando cualquier descuido, han hurtado hasta las puertas y demás objetos. Hoy el lugar sólo genera tristeza, pues es uno, de los tantos Elefantes Blancos que en la actualidad tiene Villavieja. Las paredes de este llamado ‘centro del despilfarro’ en cualquier momento se pueden ir al suelo. Aunque no se han hecho estudios previos, todo indica que el lugar no cumplía con las condiciones necesarias para que se adelantara la obra.
En el inconcluso Hospital que nunca se inauguró, no hay servicio de alcantarillado, ni de agua, ni mucho menos de energía, supuestamente porque faltaron recursos, se dijo en ese entonces. Según expertos consultados por este medio de comunicación, resultaría más viable, por seguridad, demoler la obra, en lugar de hacer remiendos y construir sobre lo deteriorado. Por este Elefante Blanco y la pérdida de recursos, se originó inicialmente tres investigaciones.
El servicio de salud en Villavieja y la atención médica es precaria. Los pacientes son remitidos hacia Neiva, ya que no cuentan siquiera con los elementos básicos para tratar a un herido. La ESE Hospital del Perpetuo Socorro, no pasa por su mejor momento, sus instalaciones están igual o peor a la obra de los $550 millones.
Villavieja, el pueblo mundialmente conocido por su atractivo turístico, mencionando al desierto de la Tatacoa, hoy es un municipio que agoniza en medio de la pobreza, la inseguridad, la falta de oportunidades, las obras inconclusas y de líderes comprometidos.
