Armando Ariza quedó absuelto de toda culpa.
El cuestionado exdirector de la Caja de Compensación Familiar del Huila, ya no iría a la cárcel, luego de que la Corte Suprema de Justicia, absolviera la sentencia que inicialmente le impuso un Juzgado de Neiva.
Aunque el exdirector de Comfamiliar del Huila, Armando Ariza Quintero sigue prófugo, en las últimas horas la Corte Suprema de Justicia absolvió la sentencia proferida por el Tribunal Superior de Neiva.
Para la Corte, una vez dado el fallo, no se presentaron irregularidades ni anomalías que involucren al cuestionado Ariza.
De esta decisión también quedó absuelta la exgerente de la Clínica Medilaser de la capital del Huila, María Cristina Vargas Urazán, quien junto al exdirector de Comfamiliar, presuntamente habrían incurrido en los delitos de peculado por apropiación y contrato sin cumplimiento de requisitos legales.
Una vez se destapó este caso, con el transcurrir del proceso judicial, ambos fueron condenados a 48 meses de prisión, junto a una sanción económica de 50 salarios mínimos legales vigentes y 60 meses de inhabilidad para ocupar cargos públicos.
Ariza y Vargas Urazán, según la Fiscalía, en los años 2003 y 2004, suscribieron un jugoso contrato, con la administración del municipio de Garzón, quien para ese entonces estaba bajo el mandato del alcalde Clodomiro Rivera. Su suma de por medio supera los 4.571 millones de pesos.
Después de casi 19 años, la Fiscalía llegó hasta este término, en donde aún con el material probatorio suficiente y una montaña de documentos de la contratación, se estancó y no logró demostrar la desviación de los recursos en mención y por los cuales los dos implicados, fueron condenados inicialmente.
Aunque Ariza Quintero se salvó de este proceso judicial, en su contra hay otro asunto pendiente. El 14 de abril del año pasado, el Juzgado Primero Penal del Circuito de Neiva, lo condenó por los delitos de estafa agravada, por el presunto recobro de medicamentos para pacientes hemofílicos.
