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Inminente pérdida patrimonial de Caja de Compensación en el Huila

La crisis financiera de la Caja de Compensación Familiar del Huila ha tocado fondo. De acuerdo con la Superintendencia de Subsidio Familiar “la pérdida patrimonial total es inminente y solo es cuestión de tiempo para que ello suceda”.

Y esta comenzó a suceder. En el mes de julio que acaba de finalizar el patrimonio total de la Caja llegó a los $5.000 millones de pesos, y en el mes que inicia la tendencia será negativa, como lo confirmó el superintendente delegado para la Gestión, Raúl Fernando Núñez, designado como agente interventor.

“Para darle cifras claras los activos de la Caja están hoy alrededor de los 779 mil millones de pesos, los pasivos están alrededor de 674 mil millones de pesos. Esto significa que el patrimonio de la Caja es de apenas cinco mil millones de pesos”, afirmó Núñez Marín en la primera entrevista sobre la sorpresiva intervención.

En su criterio, el programa de salud agregado con todo lo demás deja pérdidas cercanas a los $10.8000 millones de pesos mensuales, y agregado daría una pérdida de $8.000 millones de pesos jugando con los otros programas.

“Esto significa que ya, a finales de agosto de este año se va a revertir la situación patrimonial y va a ser negativa, es decir, por más de que se entregara todo lo que tiene la Caja no va alcanzar para pagar los pasivos de la Caja”, concluyó.

Por su parte, el organismo de control y vigilancia estimó que las acciones comprendidas por la corporación para la contención de los resultados adversos han sido “apenas tangenciales y no conducen a soluciones de fondo, como lo evidencian las pérdidas recurrentes registradas por los programas de Salud”.

De acuerdo a lo anterior, los estudios previos a la intervención revelaron otra realidad de esta crisis estructural que comenzó en el año 2009, exactamente hace 13 años.

Es así que el agente interventor insistió en que el Plan de Reorganización Institucional que debe definir la Superintendencia de Salud, no es la única solución y este debe ser reformulado.
“Creemos que es una posible salida, no necesariamente la única o la mejor. Es una salida que entendemos, en las conversaciones con Supersalud ha ido reestructurando y mejorando”, afirmó.

Por su parte, el estudio previo que soportó la intervención fue realizado con un modelo financiero presentado en el 2018 y que fue revisado; incluso este fue aprobado el 18 de febrero de 2019 por el anterior superintendente de Subsidio Familiar, José Leonardo Rojas, en la Resolución 0102 de 2018.

“Ese modelo fue avalado por Supersubsidio y revisado y se encuentra en estudio por parte de Supersalud, incluyendo a algunas entidades de la red pública como el Hospital Universitario de Neiva, la Ese Carmen Emilia de Neiva y María Auxiliadora de Garzón”, precisó Luis Miguel Losada, quien gestionó la iniciativa.

De igual forma aparecen 13 entidades privadas como la Clínica Uros, la Unidad Oncológica Surcolombiana, Rayos X del Huila, DISCOLMÉDICA, Clínica Bello Horizonte, EMCOSALUD Farmedical S.A.S., Osteosur, entre otras con ofertas por $271.875 millones de pesos, de los cuales la Caja de Compensación aportaría $101.793 millones y la Clínica Uros otros $100.000 millones de pesos.

El agente interventor aseguró que, sin duda alguna, el Gobierno debe tomar alguna decisión definitiva frente al programa de salud.

“En principio, sin ser apocalíptico, es evidente que no hay un manejo eficiente del programa de salud por muchas razones que no solo de la Caja sino del sistema de salud en general”, insistió.
Según el Superintendente delegado, una de las razones de la intervención es que no fueron tomadas a tiempo las medidas oportunas por parte de los órganos de dirección, comenzando por el consejo directivo.

“Con esto no estamos asignando responsabilidades ni disciplinarias ni administrativas ni penales ni de otra índole. Este no es el objetivo de la intervención”, aclaró.

No obstante, admitió que la intervención es prorrogable sino son cumplidos los planes de mejoramiento.

“La directriz del superintendente Julián Molina Gómez, es que la medida cumple con la temporalidad que nos hemos fijado. Las medidas no pueden ser eternas, no pueden prolongarse demasiado en el tiempo”, insistió.

El funcionario desmintió algunas versiones que circularon sobre supuestas presiones indebidas para el aceleramiento de la intervención poco antes de la terminación del actual Gobierno.

“Como le dije esta medida no fue fácil. Hubiésemos querido no llegar a este punto, hubiésemos querido soluciones más rápidas, que la Supersalud hubiese podido definir más rápido el Plan de Reorganización Institucional, sea que se aprobara o no se aprobara o se hubiese tomando otra medida”, recalcó.

Sin embargo, se llegó a un punto en que el declive de la Caja de Compensación, que su situación financiera era ya absolutamente insostenible.

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