Llegada del cuerpo de Fernando Botero a Colombia
El cuerpo de Fernando Botero ya se encuentra en Colombia, y se han planificado una serie de homenajes póstumos en su honor.
El féretro llegó al Aeropuerto El Dorado de Bogotá, donde fue recibido por su familia, representantes del Gobierno y miembros de la funeraria Gaviria.
A las 9:20 de la noche del jueves, el féretro con el cuerpo del maestro Fernando Botero arribó a la terminal de carga del Aeropuerto El Dorado de Bogotá. La recepción estuvo a cargo de su hija Lina Botero, otros familiares, una delegación gubernamental liderada por el ministro de Cultura, Juan David Correa, y funcionarios de la funeraria Gaviria, quienes se encargaron de su traslado para preparar los homenajes que durarán seis días.
El cronograma de homenajes se dará inicio a las 11 am de este viernes con un acto privado en el Capitolio Nacional, al que asistirán familiares, amigos y miembros del Gobierno. Posteriormente, al mediodía, las puertas se abrirán al público y los homenajes se llevarán a cabo hasta las 5 pm. Este mismo horario se repetirá el sábado y el domingo, de 10 am a 5 pm, como informó el ministro de Cultura, Juan David Correa. .
El lunes, la jornada concluirá en Bogotá con una misa en la Catedral Primada, que será de acceso libre para que los seguidores del maestro puedan darle su último adiós. Además, a las 2 pm se celebrará un concierto de música de cámara de estilo barroco en el Museo Botero.
El ministro de Cultura destacó: “Este evento es el símbolo de su generosidad, de su lealtad y su amor por nuestro país. Esa colección que él le entregó a Colombia es una colección que pocos artistas han donado a sus países de origen, y eso es un gesto de agradecimiento”.
Posteriormente, el martes, el cuerpo del maestro será trasladado a Antioquia, donde también se llevarán a cabo homenajes en la Catedral de Medellín. Finalmente, el jueves sus restos serán enviados de regreso a Italia para ser sepultados en el cementerio de Pietrasanta junto a su esposa, la también mítica artista griega, Sophia Vari.
El ministro Correa concluyó: “Esta es una historia de duelo y de amor, más allá de la muerte, como decía Quevedo”.
