Semana clave para la Reforma Tributaria en el Congreso de la República
Este miércoles las Comisiones Económicas del Congreso de la República sesionarán conjuntamente para así dar inicio a la discusión de la Reforma Tributaria, radicada el pasado 8 de agosto por el Gobierno Nacional.
De acuerdo a lo anterior, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo sostuvo este lunes una reunión con los congresistas de la oposición, Ciro Ramírez y Miguel Uribe, con el objetivo de revisar qué se puede replantear de la iniciativa que cuenta con 66 artículos, y que busca recaudar $25 billones de pesos en el primer año.
En ese sentido, se prevé que el jefe de la cartera de Hacienda sostenga otra serie de encuentros con diferentes congresistas para tratar esta iniciativa.
Cabe resaltar que, recientemente el ministro de Hacienda señaló que el impuesto del 4×1000 no será eliminado; no obstante, este tendrá algunas modificaciones para que los colombianos tengan más de una cuenta exenta. De igual forma, resaltó que podría presentarse su eliminación solamente para las pequeñas empresas que se formalicen por medio del régimen simple de tributación.
“El 4×1.000 continúa, punto. No hay forma de reemplazarlo. Llevamos no sé cuántos gobiernos, cinco o seis gobiernos, ninguno hemos tenido una alternativa interesante de cómo reemplazarlo por otras fuentes. Estamos pensando que valdría la pena eliminarlo para el régimen simple de tributación”, agregó el ministro.
Es de mencionar que un reciente análisis de la calificadora de riesgos Fitch Ratings respecto a la Reforma Tributaria, advirtió que es poco probable que su aprobación tenga un efecto inmediato en las calificaciones.
De acuerdo con la calificadora, los impuestos relacionados con el medio ambiente y la salud pública “podrían ejercer presión sobre los flujos de efectivo y afectar las políticas de dividendos y los planes de gasto de capital en los sectores objetivo. Esto a su vez podría debilitar los perfiles crediticios a largo plazo”.
De igual forma, la calificadora de riesgo señaló que “los emisores de petróleo y minería se verían afectados por la eliminación de beneficios fiscales, como la deducibilidad de regalías, y un nuevo impuesto procíclico del 10% sobre los precios de las exportaciones de petróleo crudo, carbón y oro. Cuando los precios internacionales están por encima de cierto umbral, los impuestos a la exportación afectarán los márgenes, la generación de flujo de caja y, a su vez, desincentiva las grandes inversiones de largo plazo en estos sectores, intensificando su tendencia a la baja en las inversiones extranjeras directas”.
