Colombianos expulsados de Estados Unidos denuncian maltratos en su llegada a Colombia.
En las últimas horas, más de 200 colombianos fueron expulsados de Estados Unidos y llegaron al aeropuerto El Dorado de Bogotá, donde denunciaron supuestas prácticas discriminatorias por parte de las autoridades estadounidenses. Algunos de ellos afirmaron haber sufrido un trato inhumano en un centro de detención migratoria en Texas, antes de ser deportados a su país.
Mabel, una mujer colombiana de 33 años, pretendía pasar por Estados Unidos para llegar a Canadá, pero su experiencia en el centro de detención migratoria en Texas fue traumática. Según su relato, les obligaron a entregar sus pertenencias y no les permitieron bañarse ni cepillarse los dientes. Además, las comidas que les proporcionaron se encontraban en mal estado. Mabel lamentó la falta de oportunidades para exponer su caso al Gobierno estadounidense y afirmó que sufrieron una discriminación horrible.
Otro de los colombianos expulsados, Jerson, viajaba con su esposa y sus dos hijos menores de edad desde Bucaramanga en busca de mejores oportunidades. Sin embargo, según su testimonio, las autoridades estadounidenses los enviaron a una cárcel y dividieron a su familia. Allí los mantuvieron bajo vigilancia las 24 horas del día y les impidieron dormir al mantener unas luces encendidas. Además, a él y a su hijo les proporcionaron ropa interior femenina.
A pesar de las dificultades que enfrentan en su tierra natal, tanto Mabel como Jerson afirmaron que no volverían a intentar ingresar a Estados Unidos y que continuarán trabajando en Colombia. A su llegada a Colombia, ellos y otros deportados recibieron un refugio temporal para bañarse antes de regresar a sus respectivos departamentos.
La Cancillería de Colombia prestó asistencia a los 209 connacionales en condiciones de vulnerabilidad y está haciendo gestiones de caracterización y apoyando la atención humanitaria en coordinación con otras entidades nacionales.
La llegada de los migrantes ha generado controversia en Colombia y Estados Unidos. Algunos defienden el derecho de los migrantes a buscar mejores oportunidades en otros países, mientras que otros consideran que deben respetarse las leyes migratorias y que la seguridad de los países de acogida debe ser una prioridad. Los retornados fueron acompañados por un equipo de profesionales encargados de recoger las quejas de los migrantes relacionadas con posibles vulneraciones a sus derechos. Se espera que durante los próximos meses, unos 14.000 migrantes procedentes de Estados Unidos regresen a territorio colombiano en el marco de un plan piloto relacionado con el Día de la Madre.
