Ola de calor devasta la biodiversidad
El río Amazonas enfrenta una grave crisis ambiental provocada por una intensa ola de calor que ha elevado las temperaturas en el Lago Tefé a alarmantes 40°C. Este fenómeno ha resultado en la muerte de más de 100 delfines y miles de peces, afectando drásticamente la rica biodiversidad de la región.
La sequía que atraviesa la región amazónica, que alberga la mayor reserva de agua dulce del planeta, ha llevado los niveles de los ríos a mínimos históricos. Esta situación ha dejado a numerosas áreas incomunicadas debido a la falta de navegabilidad, lo que ha obligado a decenas de municipios a declarar el estado de alerta.
Las autoridades expresan su preocupación por la prolongación de esta crisis, temiendo que las condiciones adversas continúen hasta enero. La combinación del calor extremo y la sequía representa una amenaza significativa para la vida acuática y para las comunidades que dependen de los recursos hídricos de la región.
Esta situación pone de manifiesto la urgente necesidad de abordar el cambio climático y sus efectos devastadores. La comunidad global debe unirse para proteger el Amazonas, un ecosistema vital para el equilibrio del planeta.
